Queridos compañeros:

Como todos sabréis, este domingo pasado fue un día triste para el conjunto de ingenieros agrónomos del Colegio, pues se nos iba para siempre nuestro querido compañero Pedro F. Gutiérrez Pulido.

La Junta de Gobierno del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Albacete, deja para otros el análisis de la figura humana y profesional de Pedro, pero sí quiere recordaros algunas facetas de su trayectoria colegial, ya que desde que se constituyó la organización colegial de los ingenieros agrónomos en España, hace más de 60 años, Pedro ha sido una de sus figuras más emblemáticas en la provincia de Albacete.

Colegiado en el Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Castilla y León al ser destinado para su puesto funcionarial en Valladolid, pasó con posterioridad al Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Levante al tomar posesión de su plaza de ingeniero en el Catastro de Albacete, ya que esta provincia se encontraba en la demarcación de este Colegio. Inmediatamente a su colegiación colaboró ampliamente con el Delegado Provincial del Colegio en las muchas tareas que le fueron encomendadas (defensa profesional, evaluación global de los colegiados para el Impuesto de Rendimientos del Trabajo Personal, conferencias, etc…).

A mediados de los años setenta, Pedro es elegido por los compañeros de la provincia como Delegado Provincial y se convierte, por tanto, en el portavoz y defensor profesional de los ingenieros agrónomos de la provincia hasta bien entrada la década de los ochenta.

Durante este tiempo, Pedro luchó enconadamente y sin descanso, por el prestigio profesional de nuestro colectivo, logrando el reconocimiento científico, técnico y social de nuestra profesión en los ámbitos más diversos.

Dotado de una extraordinaria inteligencia y una férrea voluntad, Pedro acudió con asiduidad a todas las Juntas de Gobierno del Colegio en Valencia, sin importarle la dureza de los viajes por carretera en aquellos años, logrando que la Delegación de Albacete fuese respetada y admirada por el resto de delegaciones provinciales del Colegio de Levante (Valencia, Alicante, Castellón, Baleares y Murcia).

Destacable es, sin duda, la organización que hizo de las jornadas sobre la gestión y el uso de las aguas subterráneas en la provincia que contó como ponentes con prestigiosos técnicos así como con representantes de la Administración y de los incipientes partidos políticos y sindicatos (estamos hablando de los primeros años de la transición…)

Por iniciativa suya se creó en el Colegio de Levante, la Comisión de Vigilancia, que durante muchos años asumió un seguimiento permanente del intrusismo profesional, reclamando constantemente ante todas las Administraciones Públicas, que los proyectos del ámbito agroindustrial y ganadero fuesen redactados exclusivamente por ingenieros agrónomos.

Gran mérito suyo fue conseguir que la Delegación del Colegio en Albacete contase con un local propio (el mismo que hoy acoge nuestro Colegio) para uso y disfrute de todos los colegiados de la provincia. Aunque a muchos vosotros os parezca cosa normal, en absoluto lo es, y menos para aquella época. Pensad que, en la actualidad, ninguna provincia de Castilla- La Mancha distinta de la nuestra, tiene sede colegial en propiedad.

En torno a 1982, Pedro dejó de ser  Delegado Provincial pero siguió colaborando activamente en todas las actividades colegiales, con la tenacidad y valía que le caracterizaban.

Importantísima fue también su contribución a la creación del Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Albacete, ya que formó parte de la Comisión que negoció con el Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Levante, la segregación de la provincia de Albacete del mismo y que realizó todos los estudios técnicos  y legales precisos para que se pudiera crear nuestro actual Colegio.

Seguro que la premura con que hemos escrito estas reflexiones, habrá hecho que hayamos olvidado muchas contribuciones de nuestro compañero Pedro a la organización colegial. No obstante, nuestro deseo ha sido que todos los que formamos parte del Colegio y en especial los más jóvenes, tengamos presente que esta institución que representamos, no sería hoy una realidad sin el trabajo histórico de personas como Pedro Gutiérrez Pulido.

Sirvan estas letras como recuerdo y agradecimiento a su persona y de acicate a todos para lograr que nuestro Colegio sea cada vez más una institución eficiente en el apoyo y defensa de sus colegiados.

Gracias Pedro y descansa en paz.

 

 

JUNTA DE GOBIERNO DEL COLEGIO OFICIAL DE INGENIEROS AGRÓNOMOS DE ALBACETE